Todo empezó antes de un corazón roto, de hecho, esto último simplemente fue la pieza que hacía falta para tomar mis maletas y comenzar este camino tan desconocido que se llama vida. Nunca me sentí tan lista y al mismo tiempo temerosa de lo que sigue de después de esta decisión, una que estoy segura cambiará mi vida para siempre, ¿te has sentido así?
Tengo la seguridad que las personas más despiertas y las que trascienden a otro plano son las que más crisis existenciales tuvieron en sus vidas, son las más susceptibles de sentir más que otros, están íntimamente conectadas con el Universo, esa vibración que nos eleva a otra dimensión, una muy desconocida pero excitante, una que estoy a punto de cruzar, y aunque no sé qué suceda al final de mi camino, de lo que sí estoy segura es que nunca me arrepentiré de seguir mis sueños y mi instinto.
Le agradezco a esta última persona que me rompió el corazón porque gracias a él estoy caminando en aguas distintas, misteriosas y nuevas, me siento más viva que nunca y tengo un buen presentimiento de esto. No me fallen pies, que estamos por emprender un largo camino, los necesito muy fuertes y sólidos porque no vamos a parar hasta encontrar lo que estamos buscando, esa plenitud, iluminación, vibración con el mismísimo Universo, con Dios o como lo quieras nombrar.



Un viaje a lo desconocido
No me asusta lo que dejo atrás, más bien lo que viene, a lo desconocido, a lo nuevo, pero es que, ¿quién no tiene miedo a la incertidumbre? Y aunque sí, es un camino bastante solitario e incierto, no dudo ni un minuto de cruzarlo, porque esa Karla que veo del otro lado es todo lo que soñé y prefiero morir de miedo a lo nuevo que a lo viejo; no hay ataduras solo un largo cordón que se corta con cada paso que doy, con cada amanecer que veo, lleno de vida.
La vida empieza del otro lado del miedo – o eso leí alguna vez, y ahora lo creo.
Mi corazón roto solo fue el último salvavidas que necesitaba tirar por la borda, ahora no me queda nada más que explorar por tierras lejanas, ya no me aterra ahogarme, ahora sé que el Universo me acompaña y confío en él. El estrés de quien era y lo que vivía lo veo cada vez más lejano, mi barco avanza rápidamente, me pierdo en medio de tanto océano y con una sonrisa me despido. Esa Karla con lágrimas en los ojos se despide de quién era para encontrar quien es realmente para compartirse con el mundo entero, porque este camino tan desconocido que se llama vida es el único que tengo para conectarme con mi yo superior.
Tu propósito está del otro lado del miedo
Cada una de nosotras tiene una misión, un propósito que tiene que cumplir, por eso te regalan la oportunidad de vivir una vez más, cumple quien necesitas ser, deja todo lo que no funciona y utilízalo de motor para hacer que lo demás funcione, no te asustes si en un principio nada parece claro, así es como habla el Universo. Si eres como yo, sabes perfectamente que estás más conectada que a ese ser supremos mucho más que los humanos que te rodean, te sabes diferente y eso es lo que te trajo aquí.
Utiliza esta vida para cumplir con tu propósito, no te pierdas en lo mundano y banal, recupera tu profundidad de amar y sentir, solo así podrás redescubrir quién puedes llegar a ser desde lo supremo. Veamos hasta dónde llega mi nivel de consciencia, estoy lista para experimentar lo real, bello y profundo de esta vida y de la otra, ¿y tú?
Decreto con todo mi ser que el Universo entre en tu corazón y te llene con todo el amor que mereces, solo así podrás ver lo que significas y vales en esta vida y en la otra. Todo lo bueno, hermoso y real para tu esencia de nuestro ser supremo.
Mucho amor y paz para ti.
Con buena vibra, Karla.